Un explorador andaba por el Amazonas y se encuentra con una tribu de caníbales.
El explorador, asustado, dice: ‘¡Ya me llevó el diablo!’
De repente se abre el cielo y sale un rayito de luz que lo ilumina y se oye una voz grave:
- ‘No, aún no te lleva el diablo. Quítale su lanza al jefe y mata a su único hijo.’
El explorador hace lo que le indica la voz, y mata al hijo. Los caníbales se quedan estupefactos.
De nuevo se abre el cielo, y se oye la misma voz:
- ‘Ahora sí, ya te llevó el diablo...’